Judiciales

Cámara confirma condena de 10 años de cárcel a ex policía que abusó de hijastras

Una de las salas de la Cámara de Apelaciones, integrada por Juliana Giménez, Graciela Ortiz y Efrén Giménez, confirmó la condena de 10 años de cárcel dictada contra el exagente de Interpol, José María González Marecos.

El mismo fue encontrado culpable por abuso sexual y coacción sexual de niños. Ahora se espera que un juzgado de Ejecución disponga su inmediata remisión a la cárcel.

Los camaristas Aniceto Amarilla, Myrian Meza e Isidro González habían revocado la orden de prisión dictada contra González Marecos.

En la actualidad los tres magistrados están suspendidos en sus funciones, pero cobran la mitad de sus respectivos salarios.
González Mareco es un exagente de Interpol (Policía Internacional), que ya contaba con arresto domiciliario durante la etapa intermedia. Después de un largo debate público se dictó la sentencia y el Tribunal dispuso su   inmediata reclusión carcelaria. Fue demostrado su responsabilidad en un hecho de abuso sexual y coacción sexual. Sin embargo, la defensa recurrió a segunda instancia y logró retener dicho beneficio.
Las víctimas fueron sus hijastras y el Tribunal de Sentencia estuvo integrado por los jueces Alba Meza, Oscar Genes y Evangelina Villalba.

El Ministerio Público había solicitado 13 años de pena privativa y la querella adhesiva 15 años.
Para el cumplimiento de la reclusión domiciliaria se estableció una vivienda ubicada en la ciudad de Itacurubi de la Cordillera. Los camaristas ahora suspendidos adoptaron dicha medida de manera inusual. La localidad  en cuestión queda a más de 200 kilómetros de Ciudad del Este.
González Marecos mantuvo por más de 3 años como esclava sexual a sus hijastras. Una de ellas desde que tenía 8 años de vida. Después se percataron de lo ocurrido en la escuela donde asistían las víctimas y se dio participación a las autoridades.
La madre de las niñas sabia de lo ocurrido a raíz de que la hija mayor había mencionado que fue víctima de abuso por parte del padrastro. Sin embargo, no denunció el lamentable suceso, pero la menor relató después de muchos años en la escuela.

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