El juez de la capital Humberto Rene Otazú condenó por lavado de dinero a Ilan Grinspun, administrador de varias empresas en Paraguay de Darío Messer, y a Juan Pablo Jiménez Viveros. Ambos recibieron condenas de 2 años de prisión pero no irán a la carcel, ya que pagarán la suma de G. 10 millones como “reparación del daño social”, pese a que los dos fueron investigados por un esquema de lavado de dinero de aproximadamente US$ 40 millones.
Ambos tienen prohibición de salir del país y de cambiar de domicilio, también deben comparecer cada tres meses ante el Juzgado.
Como “reparación del daño social ocasionado”, los condenados pagaron G. 10 millones cada uno. El dinero será donado a las fundaciones Asoleu y “San Rafael” del padre Aldo Trento.
Los ahora condenados fueron procesados en la causa que investiga un esquema de lavado de dinero de cerca de US$ 40 millones, en la que también están procesados Darío Messer, preso en Brasil, y su hijo, Dan Wolf Messer.
Según las investigaciones, Messer creó al menos cuatro empresas en Paraguay: “Chai SA”, “Matrix Realty SA”, “Mazal Group SA” y “Gramonte SA”. En todas estas empresas, Ilan Grinspun estaba vinculado.
Publicaciones realizadas por nuestro Diario el 4 de Mayo del 2018, apuntaban a que Grinspun ayudó el día anterior a Darío Messer a escapar del Paraná Country Club a una estancia de “La Colmena”, departamento de Paraguarí, luego de que sea emitida su orden de captura internacional.
Esta información se confirmó al publicarse los primeros reportes de la delación premiada del “doleiro” Darío Messer, que confirmaban que el brasileño fue sacado del complejo el 3 de Mayo y “resguardado” en una estancia del departamento de Paraguarí.
Tanto Grinspun como Jiménez intentaron cobrar dos cheques por G. 2.000 millones de las cuentas de dos de las empresas de Messer, dinero depositado en el Banco Nacional de Fomento (BNF). Los dos cheques estaban en dólares y pertenecían a las empresas Matrix S.A. y Chai S.A.
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